Dentro de las aguas territoriales ecuatorianas, la zona de Galápagos está declarada como «santuario de ballenas» y el resto del mar territorial es «refugio de ballenas».
Foto: Dirección de Turismo de Sta. Elena. |
Cuando llegan a nuestro territorio, además de ser víctima de predadores naturales, las ballenas jorobadas tienen una serie de problemas a causa de actividades humanas.
El más grave, es el uso indiscriminado de redes pesqueras; pues al enredarse en ellas o mueren por agotamiento o son presa fácil de sus predadores. En muchos casos se han detectado trasmallos enredados en sus aletas pectorales y colas.
Otros problemas menos evidentes , pero no menos dañinos en el largo plazo, incluyen: la contaminación del mar con desechos industriales (aceite usado por ej.) que afectan sus sistemas reproductivo e inmunológico; plásticos, el ruido causado por embarcaciones pesqueras, militares y de observación que a la larga interfieren en sus actividades sociales como apareamiento, lactancia descanso, comunicación, etc.
Estos ruidos incluyen motores, sonares, explosiones y malas maniobras.
El experto navegante Carlos Julio Santander, nos explicó que en realidad la mejor embarcación dedicada a la observación de ballenas , debería ser el velero, especialmente por su cualidad de ser silenciosa, aunque está conciente que esto debería ser un proceso pues al momento es toda una infraestructura la que está formada para la temporada de observación.