Tsunami, estamos realmente preparados?

Montañita en horas de la tarde

Una vez que el Presidente de Ecuador, Rafael Correa levantó hace pocos minutos la alerta nacional de tsunami, y teniendo que lamentar tan sólo un accidente de gravedad en la provincia de Santa Elena, con un miembro del Cuerpo de bomberos involucrado y con estado reservado; sería un buen momento para empezar a reflexionar si en realidad los planes de contingencia ante este tipo de eventos estarían listos para ser aplicados en el caso (realmente probable) en que el evento de un tsunami tenga un menor tiempo entre el momento en que se levanta la alerta y el evento en sí mismo.


Desde la revista BallenitaSi Online, creemos oportuno enumerar algunos puntos que fueron denunciados o comentados por los posibles afectados y que podrían ser mejorados para poder llegar a ese objetivo, que a manera de analísis presentamos:


1. Existieron denuncias de que a primeras horas de la mañana, desde Montañita habían transportistas que apuntaban a cobrar 10 usd por un pasaje que normalmente cuesta 1,50 usd hasta Santa Elena. POSIBLE SOLUCION: Planificar anticipadamente con los transportistas de la necesidad e importancia de su papel durante estos eventos. La solución que apareció a lo largo del día como que «el Gobierno reconocería a los transportistas por su labor» no debería ser algo como para «salir del paso» o de «buena gente» , sino producto de una planificación.


2. Un papel importantísimo demostraron nuevamente las radios. Lastimosamente, por lo menos durante buena parte de la mañana al escuchar cualquiera de ellas, en cada una de ellas se escuchaban cosas diferentes, información cruzada, etc. Por ejemplo , en una estaban transmitiendo en vivo a Juan Antón, (SNGR-SE) y a los pocos minutos en otra cuestionaban que nadie de Gestión de Riesgos hacía una declaración. POSIBLE SOLUCION: Una vez que se declara este tipo de alarmas y estados de excepción, todos los medios deberían enlazarse y compartir dicha información que debe salir sólo desde fuentes autorizadas.


3. NO EXISTE EN CASI NINGUNA DE LAS COMUNIDADES CON POSIBLE AFECTACION, UN VERDADERO Y EFICIENTE SISTEMA DE ALARMA. Hace más de un año, esta fué una de las ideas que se propuso en la comunidad de Ballenita, en reunión planteada ante la SNGR-SE. Aunque en la web de la Secretaría se menciona un concurso para este efecto, nada concreto se ve en las comunidades. Es necesario y a-priori que este sistema sea implantado y socializado con estas comunidades. Montañita, con su sistema de altoparlantes , al estilo «radio bemba» ha demostrado tener un efecto rápido, económico, eficiente y positivo para mantener actualizada a la comunidad. En cambio , por ejemplo en Ballenita, durante el día de ayer cerca de 4 horas después de lo dispuesto por el Gobierno, no existió ningún llamado o perifoneo. El sistema de radio funcionó, pero con las falencias antes mencionadas.


4. Debe existir una mayor socialización de los pasos a seguir, zonas de evacuación, delimitación y señalización de éstas en TODAS las comunidades con posible afectación POSIBLE SOLUCION: Fortalecimiento de la SNGR a nivel nacional. En Santa Elena provincia, menos de 10 personas definitivamente no han podido dar abasto pese a sus comprobados esfuerzos de multiplicación a cubrir todas estas áreas de capacitación, adecuaciòn y señalización para zonas seguras, sencillamente no las tenemos. La Gobedrnación se apresuró por la  La población, en un país como Ecuador, debería estar altamente preparada frente a estos eventos y el pánico que se vió a lo largo del día evidenció lo contrario.


Más de 200,000 personas evacuadas sin mayor novedad, demostraron un gran esfuerzo final  conjunto como gobierno y sociedad, sin embargo es prioritario admitir en primer lugar estas falencias para así corregirlas prontamente.
Un fuerte agradecimiento a todos quienes se movilizaron durante más de 20 horas, dando su mejor esfuerzo para lograr que en este proceso de evacuación no existan incidentes que lamentar y también una fuerte crítica a los muy pocos que tan siquiera se imaginaron que era un buena momento para aprovecharse económicamente de quienes pugnaban por salir de los lugares críticos