Ecuador identificó 400.000 hectáreas aptas para cultivos a partir de los cuales planea producir biocombustibles, dijo el presidente Rafael Correa durante su última intervención sabatina.
«Ya tenemos el mapeo de las zonas agrícolas y hay 400.000 hectáreas donde no hay nada» y se puede sembrar caña de azúcar o palma africana, señaló el mandatario en su informe semanal de labores.
Correa explicó que esas áreas, ubicadas en provincias como la costera de Santa Elena, son propicias porque al estar baldías no se generaría desplazamiento de bosque, especies endémicas o cultivos tradicionales.
El gobernante indicó que un programa piloto se desarrolla con «éxito» en el puerto de Guayaquil, en el marco de una política que prevé además estímulos para los ingenios azucareros que produzcan biocombustibles.
«Vamos a hacer una ley, a dar incentivos, no sé si tributarios, lo estamos estudiando, pero también de precios mejorando un poco los del etanol para que les sea rentable a los ingenios, que prefieren hacer azúcar con la caña», porque les deja más ganancias, sostuvo.
Correa dijo que su programa de biocombustibles también incluye recursos para investigación de nuevas tecnologías, y se complementa con un plan destinado a mejorar la calidad de las gasolinas que costará unos 200 millones de dólares anuales.
«Tenemos que iniciar un debate nacional para ver de dónde sacamos» ese dinero, dijo el mandatario, cuyo país destina unos 2.000 millones de dólares al año a subsidiar los combustibles.
Correa indicó que un programa piloto se desarrolla con «éxito» en el puerto de Guayaquil, en el marco de una política que prevé además estímulos para los ingenios azucareros que produzcan biocombustibles.
Críticos afirman que el uso de esas tierras son las que han motivado la represión hacia las comunidades que se ha visto durante semanas pasadas y que con estas acciones del gobierno es de esperar más.
Mientras tanto el Presidente Correa aseguró: El desafío es lograr que los agentes económicos, buscando su lucro, logren el mayor bienestar social» «Tanques llenos, estómagos vacíos» argumentó Correan dando a entender cuál es otra de las voces contrarias a este tipo de megaproyectos.
FUENTE: AFP