Nube de contaminación en China. FOTO: NASA |
La creciente contaminación en la China es ya fácilmente observable desde el espacio.
Una gigantesca nube contaminante que afecta a 12 provincias de China es visible a través de los satélites de la NASA y ha afectado desde hace varios días a la transportación, además de un gran crecimiento en la venta de mascarillas.
Esta inmensa nube hizo que desde la semana anterior salten las alarmas por los niveles de contaminación en Beijing, donde los niveles han estado por varios días muy por encima de los considerados peligrosos para la salud humana, hasta en el doble del límite de partículas contaminantes que la Organización Mundial de la Salud ha determinado como nocivo para la salud humana.
Por este motivo fueron suspendidas todas las actividades deportivas al aire libre según las normativas vigentes.
Aunque estas índices alcanzaron niveles inusualmente altos en algunas de las provincias afectadas en los últimos días, lo cierto que en la capital de China son más habituales, especialmente bajo condiciones como falta de viento y densa humedad; situaciones que son agravadas por el aumento del uso de carbón para combatir las temperaturas invernales, a la creciente actividad industrial y tráfico vehicular.
La densidad de partículas de 2,5 micrones de diámetro (PM 2,5), las más peligrosas, superaron en ciertas zonas el límite de 993 microgramos por metro cúbico, según el centro de vigilancia medioambiental de la capital china. Las PM 2,5 pueden penetrar hasta en los alvéolos pulmonares y emigrar a la sangre.
Esta situación ha obligado a las autoridades chinas a implementar el plan de emergencia para combatir la contaminación, entre las que constan: la suspensión de operaciones de 58 empresas altamente contaminantes, la obligatoria reducción del 30% de las emisiones contaminantes a otras 41 y la paralización de 28 grandes obras en Pekín.
Desde diversos espacios en redes sociales, blogs y otros han ido en aumento las críticas al desenfrenado ritmo de crecimiento económico del país. Estas críticas están comenzando a ser receptadas por otros medios tradicionales como el Diario del Pueblo, órgano oficial del Partido Comunista chino el cual días atrás publicó un titular que sentenciaba: “Construir un China hermosa empieza por respirar de manera sana”
Otros medios como el China Daily han calificado de “saludable” el debate sobre esta cuestión. “En pleno proceso de urbanización rápida, es urgente que China reflexione sobre la manera de llevar este proceso sin que la calidad de vida urbana se vea comprometida por un medioambiente cada vez más deteriorado”, mencionó el diario.
China, la cual es la segunda potencia económica del planeta y el primer mercado mundial del automóvil, ve amenazado su medioambiente por sus numerosas industrias contaminantes, su tráfico por carretera en constante expansión y su lentitud a la hora de proteger los ecosistemas. Un 70% de su energía proviene de la combustión del carbón, lo que hace de China el primer emisor mundial de gases de efecto invernadero. Ecuador debe más de 3,000 millones de dólares a la China en préstamos relacionados al petróleo.
Según Greenpeace, durante el 2012 los altos niveles de contaminación del aire causaron unas ocho mil 500 muertes prematuras en Beijing, Shanghái, Cantón y Xian.
Fuentes: Terra Noticias/NOAA/El Comercio.